En la Champions de 2010 al Real Madrid le tocó, en fase de grupos, el Auxerre. Cuando ambos clubes se enfrentaron en tierras francesas y Mourinho salió a dar la preceptiva rueda de prensa pre-partido, había un señor mayor en la primera línea de los periodistas, sentado y escuchando al mister portugués con una sonrisa en los labios. Al terminar la misma, José bajó del estrado y se fundió en un abrazo con él. Aunque la mayoría no lo reconocieron, Mourinho se estaba abrazando a la que posiblemente sea la mayor leyenda europea de los banquillos. Un hombre que cogió al Auxerre en amateurs y lo llevó a la Ligue1, a ganar 1 Liga, 4 Copas, 1 Intertoto y a llevar al modesto Auxerre a semifinales de la UEFA. Todo esto en 44 años ininterrumpidos como entrenador y manager del equipo. Mou se estaba abrazando a Guy Roux.
Tenemos que remontarnos atrás, muy atrás, para comenzar con esta historia. Concretamente, hasta 1961, el año en que, con 21 primaveras, el joven Guy Roux cogió las riendas del Auxerre, por entonces un equipo de regionales. Hay que reseñar como -dicen que- se hizo el joven Guy con el puesto de entrenador (y jugador) del Auxerre. Al parecer, el Auxerre se enfrentaba en un amistoso al Crewe, un equipo británico de su mismo, e ínfimo, nivel. Al descanso, se solicitó si entre los presentes se encontraba alguien que supiese hablar inglés. Roux se ofreció voluntario y tras hablar con los técnicos del equipo visitante, tradujo que uno de sus jugadores se había lesionado y que no tenían cambios para jugar la segunda parte. El mismo se ofreció, otra vez, voluntario para jugar con el Crewe. No lo debió hacer del todo mal ya que, al acabar el partido, el presidente del Auxerre, por entonces Jean Garnault, le ofreció jugar con ellos. El aceptó, con una condición: compatibilizarlo con el cargo de entrenador, su verdadera vocación. Naturalmente, el presidente se negó, a lo que Guy Roux contraatacó pasados unos días enviándole un informe de varias páginas explicándole los métodos de entrenamiento que usaría, los jugadores que debían contratar e incluso recomendando nuevos campos de entrenamiento. Ante tanta pasión y eficiencia Garnault no se pudo negar y le dió el puesto de entrenador. Comenzaba la era Roux.
No fue un éxito meteórico el suyo, ni mucho menos. Tardo nnueve años en subir el equipo a Tercera, y cuatro más en auparlo a Segunda, en 1974. En 1979 jugaría su primera final de Copa, perdiendo frente al Nantes por 4 a 1. Un año después, el bombazo estallaba en Auxerre: el equipo ascendía por primera vez a la Ligue1. No fue hasta 1994 cuando el equipo logró su primer título, ganando al Montpellier la Copa por 3-0. Dos años después, la locura: un doblete de Liga y Copa. Aún tendría tiempo de ganar otras dos Copas más hasta que, en 2005 y con problemas cardíacos, Roux decidía poner punto final a su trayectoria con el Auxerre: "Más vale retirarse con una Copa que con un descenso", fueron sus palabras al respecto.
En 2007 tuvo una brevísima aventura en el Racin Club Lens, donde, a pesar de ser entrenador, no figuraba como tal debido a que en Francia no se puede ejercer con más de 65 años y el mister "oficial" era su segundo de a bordo. No obstante, dimitió del puesto tras 4 jornadas. tras perder 2-1 frente al Estrasburgo. El punto final a su carrera llegaba con 69 años y solo dos clubes en su historial: 44 temporadas con el Auxerre y unos partidos con el Lens.
Ahora, ya retirado definitivamente, pasa por ser venerado en Francia. Sigue acudiendo al estadio del Auxerre y de vez en cuando se pasa por los campos de entrenamiento cuya ubicación el mismo eligió. Si no conoces su historia puede que lo confundas con un jubilado que hace tiempo antes de su aperitivo de media mañana, cuando realmente es el entrenador por antonomasia en Francia y, porque no, en Europa.
(Vaya este artículo en memoria de @van_palomaain. Donde quiera que estés sigues siendo "Uno di Noi". Juanan, Descansa en Paz).
Por Dani_LQDM
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