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18 de mayo de 2013

Si el líder se borra, los jugadores tambien.

José Mourinho tambien tiene defectos deportivamente.  Y esta temporada lo ha demostrado claramente en dos partidos importantes, en Dortmund, en semifinales de la Champions League la cagó excesivamente ante el Borussia, y hoy se a equivocado claramente en el planteamiento del partido ante el Atlético de Madrid.

Mourinho dejó en banda derecha a Ozil, jugador que en banda no rinde porque no es su posición y efectivamente naufragó.
El portugués coloco un trivote para tener el balón pero naufragó en tres cuartos de cancha. Khedira muy volcado a banda derecha, perdía excesivos balones y sus cabalgadas eran inútiles, Modric fué el único que tomó las riendas del centro del campo pero no lograba conectar con espacios con Benzema ni Cristiano. Xabi Alonso estuvo totalmente ahogado por las constantes ayudas de presión facilitadas por un Diego Costa espectacular y un Falcao muy sacrificado por el equipo.

Cristiano Ronaldo se fué diluyendo con el paso de los minutos y su crispación iba en aumento constante tras cada falta que le hacían. Táctica pensada por Simeone para intentar sacarle mentalmente del partido, y el plan le salió perfecto, incluso Cristiano Ronaldo acabó expulsado.

Albiol, pareja de Ramos en el centro de la defensa, hizo un trabajo perfecto y se rehizo de las críticas.

Essien, naufragó en banda derecha porque no tenía una referencia por delante suyo. El Ghanés tenia toda la banda para él porque Ozil apenas le ayudaba defensivamente.
Koke y Filipe Luis le comieron la tostada jugada si y jugada también y el Real Madrid sufrió constantemente los ataques atléticos por ese lado.

Mourinho, no debió acordarse de que Essien, no es lateral sino mediocentro, y no colocó a ningún jugador para ayudarle.
En otros derbis, Di Maria jugando de interior derecha, evitó las constantes subidas de Filipe Luis porque este, se centraba mucho más en defender al argentino.

Básicamente, la banda derecha del equipo dirigido por Mourinho, era un coladero.

Durante los 90 minutos, Mourinho no hizo ningún cambio de sistema ni dió entrada a Di María que podría haber desequilibrado el choque.
Al esperar a la prórroga y hacer los 3 cambios a la vez, Arbeloa entró por Coentrao que tenía tarjeta, Higuaín por Benzema y Di María por Modric que acabó tocado.

Con el gol de Miranda que desequilibraba el empate a 1 del final de los noventa minutos, el equipo blanco desapareció, no jugó a nada, no tuvo el balón ni tuvo opciones en la prórroga y el Atlético creció con cada minuto más.

La crispación provocada por la pésima gestión de intentar remontar el resultado llevó a algunos jugadores a la locura. Cristiano acabó expulsado justamente por una agresión a Gabi, y Ozil acabó diciéndole de todo al juez de línea. En los banquillos, Mourinho tambien acabó expulsado por protestar y hubo una tangana en la zona del cuarto árbitro dónde Diego Costa, Simeone y el "Mono" Burgos hicieron de las suyas.

La realidad es que una temporada más, toca reflexionar y pensar en lo que se a echo mal.
Muchas cosas tiene que corregir el conjunto blanco si quiere sacar esto adelante.

11 gladiadores necesita el Real Madrid, no 11 vividores ni mercenarios.

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