Eléctrico, asistente, veloz, desequilibrante, trabajador… estos
son algunas de las cualidades que han definido al argentino Ángel Di María desde su llegada al club blanco procedente del
Benfica en verano de 2010 por petición personal de José Mourinho, uno de los
grandes interesados para su llegada.
Así, el Fideo fue una de los grandes destellos de la campaña
anterior, jugando un total de 32 encuentros en los que logró marcar 6 tantos,
convirtiéndose además junto a su compañero alemán Mesut Özil en los grandes
asistentes de un equipo que batió todos los récords tanto goleadores como de
puntos en la Liga.
Sin embargo, tras la renovación de contrato firmada hace unos meses
su rendimiento ha bajado mucho durante estos últimos meses. Pecando mucho de
individualista, sin su chispa habitual para el uno contra uno y con un
despliegue físico mucho menor que el año pasado, el argentino se ha ganado
alguna reprimenda por parte de técnico José Mourinho.
Mientras tanto, según destaca los rumores, algunos equipos siguen
muy atentos a sus pasos. Entre estos encontramos a Manchester United y PSG, que pese a que no se han decidido a dirigirse al
Real Madrid de forma oficial están realizando una serie de averiguaciones sobre
lo que podría pasar con el argentino si finalmente se marcha José Mourinho, el
hombre que le llevó a la casa blanca.
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