Lo que está sufriendo Iker Casillas desde el nacimiento de su hijo, es sin duda vergonzoso y intolerable. Ya no por el acoso hacia el capitán del Real Madrid y de la selección española, si no por que en este caso es un bebé el que está siendo atacado.
Cada persona tiene sus pensamientos, sus creencias, sus preferencias, sus deseos.. Cada uno es libre para criticar o querer el bien o el mal para el Santo de Móstoles.
Todo lo que pasó con Mourinho debería de ser agua pasada ya, pero por lo visto, las aguas no han vuelto a su cauce y los resentidos ahora atacan a un bebé que apenas tiene unos dias. Es patético que esto esté pasando en pleno S.XXl.
Las redes sociales son un hervidero de insultos y menosprecios al menor, y sobretodo a sus padres (Iker y Sara).
Cordura es lo que necesita la gente, podeis odiar a Iker, podeis llamarlo "Topo", "Santo", lo que sea, podeis odiarle más o quererlo menos, pero un bebé recién nacido no debe de soportar la ira o el odio hacia los padres.
Paz.
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